27.3.06

DOS ES, AL MENOS, MAS QUE UNO. POR ESO SE METIO A LETRAS




Le he dicho a la "ele" que es una letra preciosa pero la obligación de tener que decirla cada poco, me enreda la lengua hasta tal punto que preferiría leerla con el pensamiento, pero como no tengo pensamiento, mi lengua es estrangulada sin misericordia, sobre todo en pasajes difíciles y alveolares.

La "jota" es también muy bonita. La aparición de un eccema en la jamba del paladar no ha borrado del todo esa impresión.

La "eme" me asfixia, pero no me mata. Todavía vivo para decirla. Mamá y tal.

La "cú" (la qu) me frunce la boca y afecta mi garganta de tal curiosa forma que comunicarme con estorninos es ya posible sin que ellos noten sorpresa alguna.

Con la "zeta" me muerdo la lengua que uso para otras letras, por este motivo la suelo decir sola. De todas formas no la digo mucho, la verdad.

La "eñe" arruga los órganos que van de cintura para arriba, más o menos, tampoco me fijo tanto. También se te pone cara de oler a mierda levemente.

Si la "ese" es líquida, produce maravillosos nombres de mujer, si no lo es, se le escapa a quien la pronuncia grandes cantidades de aire, y como bien saben, el aire no es siempre todo lo limpio que uno desearía, sobre todo a ciertas edades y a ciertas saludes (¿qué habrá querido decir con eso?).

La "erre", si es simple, cura la lengua de males viperinos y hasta bífidos cuando se pronuncia con cariño. Si es doble provoca terremotitos cerebrales y pequeñas diarreas a media tarde. Si es triple, rompe la noche.

La "y" y yo.

La "be" es buena y un poco boba, la uve puede ser viral si creemos en la enfermedad, pero si la vuelves a ver, verás que se abre hacia el cielo.

Sin la "de" no podríamos nombrar a Dios, lo que nos ahorraría su existencia. Los dedos no podrían ser dos. Ni podríamos jugar a los dados y decir ¡doce! Ni sabríamos donde duele el dolor.

La "efe" no es tan efímera, ni tan fiel, ni frena tanto, ni es tan fea, ni tan fácil, ni tan difícil. También la nota fa tocada por un fagot que no haya bebido mucho (beben más los que tocan trompetas, trompas y trompones).

Es muy difícil no martillear con la "te". Hay quien se ha dejado tres dientes en la acera por decir malamente "Tito te toca tu teta". Lo más recomendable es tañir la "te" con tiento.

"Ge" de gata, girasol, gorro, gesto, gusanito guerrero, gente gastando generosamente, Genaro García Gómez Garrido grita al ganado. Hay muchas más.

La "equis" es alienígena, subversiva y pornográfica. Por eso se suele decir por la noche.

La "ka" es vaska y etruska. De todas formas se pueden decir dos o tres palabras que sirven para medir.
¡Oh! Me dicen por el pinganillo que la "ka" ha regresado con fuerza a los móviles y a los correos electrónicos ¡Ya está en todos los kioscos!

Cuando la "ce" aparece, todo es normal. Lo normal está muy bien también.

Otro día hablaremos de la "elle" que tiene un color alegre y parece un ser bastante besable si no fuera porque "elle" nunca llama dos veces.

Nadie sabe qué cosa es nada ni ninguno ni nadie ni no. Gracias, "ene", por tan poca ayuda. No nos hace ninguna falta ninguna ayuda para saber nada de ninguna cosa. Con la "ene" no somos nadie.

¿Es necesario hacer recuento de la cantidad de saliva que se ha desperdiciado en caras ajenas por pronunciar estrepitosamente la "pe"? Pepe lo sabe bien. Cuando lo llames ponte un pañuelo.

(Hache)
Siento que me dejo alguna. Si es así uelga decir que oy no e terminado.

7 dijo:

Blogger Llusilanisa dijo...

Recuerdo la historia inventada de un capellán que enloqueció porque no se veía capaz de pronunciar bien la letra "amígdala".
Sus amigos le decían que esa letra no existía, que amígdala era una palabra con personalidad propia, fruto de la suma de otras letras pero el tozudo capellán pasaba noches enteras intentando dar con la maldita letra y pronunciarla correctamente.

(Me parece que oigo una leve alteración en la frecuencia 440 hz pero no estoy seguro)

Por si las moscas no traten de dar con la letra "amígdala". El capellán murió solo y una familia de Palamós bailó sobre sus restos.
De ellos creció un puma adulto llamado Igor y recitó un poema en perfecto eslóvaco ante el asombro de todos los allí presentes. O sea , nadie.

17:06  
Anonymous Anónimo dijo...

Interesante historia(la del capellán).Realmente me ha generado gran curiosidad/preocupación.
¿Murió de viejo sumido en "su" intento de simbolización amigdaliática o más bien se murió de joven al acartonárse"le" la faringe en el ejercicio obsesivo de hacerla sonar(la palabra)?
(Agradecería aclaración)

13:03  
Anonymous Anónimo dijo...

No es por nada, pero por ahí, a alguién, se le ha escapado una tilde.

14:43  
Blogger Llusilanisa dijo...

Fue mucho tiempo ya el que empleó el estudiante Rashmore Pumpklaus en descubrir las causas del óbito del capellán.

Sus conclusiones fueron tres: (Uno)Nadie sobrevive a dos accidentes aereos en primera persona, (dos) Las tormentas tropicales en pequeñas dosis pueden resultar beneficiosas para la salud y (tres) nadie debió regalarle un tigre de bengala a un niño tan pequeño.

La existencie de linimento "Viloca " en los pliegues cutaneos del fallecido apunta al niño Valdemar de Gokosedis como principal sospechoso del asesinato y le acusan de no saber dosificar correctamente su eterna juventud entre sus distintos órganos.

Quien diga lo contrario miente o gusta de hacer uso de la oposición permanente.

17:05  
Blogger fran rubio dijo...

Desconozco la verdadera historia del capellán, pero quiza pueda decir alguna cosa sobre capellanes con laringe restringida, especie cuya evolución morfológica no parece revelar ningún cambio significativo en cuanto a la capacidad de emisión de sonidos más allá de débiles sollozos y lamentos desdibujados. Mucho más no puedo añadir, excepto que algunas familias han puesto alguno de estos homínidos en el recibidor.

17:38  
Blogger Llusilanisa dijo...

Existe un cierto interés en desmitificar las anginas. Sospecho que fueron inventadas en algun lugar cerca de Salamanca o tal vez en Kenia. Son muchos los que allí se quejan de fuertes dolores al tragar saliva y zumo de carne, no parecen ser felices con ello y escriben numerosas cartas de queja a las autoridades locales.

Eso me hace pensar que un homínido en el salón siempre es un bonito adorno, recuerdo a un misionero belga, el mismo que fundó el "comité de bienvenida a personas que retornan del oceano Pacífico" y que se hizo famoso. Permaneció tres días en el salón de mi casa en posición fetal y fué condecorado por ello.

19:27  
Anonymous Anónimo dijo...

Que pena. Pobre capellán ....
Hubiera sido bonito un encuentro a tiempo o a destiempo con el misionero belga.
Las bienvenidas siempre hacen olvidar las palabras asfixiantes.

13:59  

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