¿NOS CONOCEMOS DE ALGO, SEÑORITA?
No estoy seguro de conocerla, señorita, y, aunque se trate de una seguridad verdaderamente insegura, tampoco puedo hacer milagros acerca de mi conocimiento real sobre usted, lo cual es independiente de la aceptación que usted pueda, señorita, tener acerca de los mismos fenómenos.
Ni siquiera la opción que los milagros nos aporta, o la de los no milagros, o de cualquier otra cosa en general, como por ejemplo una pequeña corneja de color pardo o un muelle pequeño, logre empañar un hecho que, para una mente despejada, puede resultar evidente: “quizá no la conozca del todo”.
Lo contrario no podría afirmarlo con la misma rotundidad. En cualquier caso, por si se da la circunstancia de que yo llegue a ser ese yo que usted al menos aprobaría siquiera someramente pero, eso sí, con cierta calidez, vaya por delante mi más sincero afecto sin que un posterior efecto en usted, señorita, llegue a tener ninguna consecuencia sobre mí como “generador y receptor de acontecimientos”, sino como mi corazón
que es el suyo, señorita.
Ni siquiera la opción que los milagros nos aporta, o la de los no milagros, o de cualquier otra cosa en general, como por ejemplo una pequeña corneja de color pardo o un muelle pequeño, logre empañar un hecho que, para una mente despejada, puede resultar evidente: “quizá no la conozca del todo”.
Lo contrario no podría afirmarlo con la misma rotundidad. En cualquier caso, por si se da la circunstancia de que yo llegue a ser ese yo que usted al menos aprobaría siquiera someramente pero, eso sí, con cierta calidez, vaya por delante mi más sincero afecto sin que un posterior efecto en usted, señorita, llegue a tener ninguna consecuencia sobre mí como “generador y receptor de acontecimientos”, sino como mi corazón
que es el suyo, señorita.
5 dijo:
"Quizá no la conozca del todo".La clave está en esta frase.Si uno es receptivo no importa en absoluto conocer o no a alguien.Yo diría que es lo de menos y bastantes veces resulta un estorbo,pues ya te está condicionando el resto que pueda venir detrás.
A veces basta con intuir a alguien,en vez de conocerlo.Quizá sea más certero....
Casi nunca se conoce a nadie,aunque lleve durmiendo en tu cama años y años.Y por qué,porque no logramos entrar en el mismo corazón de su interior.Nos quedamos en el camino y vuelta a empezar.
También es porque como todos estamos en permanente cambio-evolución-crecimiento no nos damos tiempo ni de darnos a conocer ni de conocer al de al lado,ni de conocernos a nosotros mismos no?.Bye,bye..................
Pero, qué haces.... estoy fuera un par de días y me encuentro llorado a las chicas....
estoy de acuerdo con Copios-a, pienso, que no se trata de pajeosmentales tipo peliculadisney,
el amor-amistad humanamente incondicional existe, pero hay que a-prehender-lo, lo experimentamos por primera vez cuando somos padres y lo podemos ir aplicando a otras relaciones, las elegidas.
Lo que sí es imprescindible es no tener miedo a sentir.
Los sentimientos son míos, eso lo tengo clarísimo, y además los localizo, los siento, los disfruto o los lloro.
Después he aprendido a compartir... con quien decido y ...lo desea.
A Doc Röegter: ¿Qué opina usted, es o no la intuición un conocimiento certero aunque no tenga formas concretas?
La intuición forma parte de nuestra verdadera naturaleza, siempre sincera, la cuestión está en saber interpretarla
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