SOL INVERSO
—Señorita Verso, su habitación está preparada.—Gracias, Ibernius, deje la lamparita ahí encima y camine hacia atrás como si una fuerza lo rebobinase a usted.
—Cómo no, señorita. Pero la lamparita tendrá que rebobinarse conmigo, si quiero ajustarme completamente a su criterio.
—Llévese la lamparita.
—Cómo no, señorita, pero su memoria será rebobinada con nosotros (la lamparita y un servidor de usted), ¿le importará eso a usted?
—Está bien, quédese un rato más y procure no ruborizarse cuando vea que se me eriza el pelo y me entrego a una energía sexual sin agentes implicados danzando enajenadamente ante usted, sin otro propósito que el de desaparecernos rebobinados de toda esta escena, y regresar a nuestro estado anterior, es decir, cuando la habitación no estaba preparada.
—Por fin estoy hablando solo. Sepa que la amo.
por fran rubio en 1/19/2007 02:15:00 a. m.
11 dijo:
¿Por qué es tan difícil amar?
¿Difícil amar?
... más bien inevitable cuando ello sucede.
Si. Cuando sucede es inevitable, y ese el problema, porque el amor está sucediendo todo el rato.
El problema somos nosotros, organismos identificados con el miedo a que el amor no nos suceda todo el rato.
Como si fuese algo que viniese de fuera.
ahí las dao, fran
Entonces...,¿nosotros tenemos la libertad y la responsabilidad de decidir si queremos Sentir o no hacerlo?
Pienso que el problema no es tanto el miedo a que el amor no nos suceda todo el rato, sino a que no nos sea correspondido.
A veces se opta por renunciar al amor ante la complicación (problema) de tener que admitir y asumir que los "otros" (hijos, padres, pareja, amigos)no nos devuelvan lo que esperábamos de ellos.
Entregarse al amor significa también la posibilidad de sentirnos rechazados y abandonados.
Y para asegurarnos de que esto no ocurra nos inventamos llaves que nos garanticen la sujeción de la otra persona.
Una situación clara es la del casamiento.Otras menos tangibles pueden ser los chantajes emocionales.
El amor no necesita de nuestra intervención (como muñecos identificados) para ocurrir. Lo de la correspondencia en el amor pertenece más bién al ámbito de la gestión del amor, pero de eso ya se habla suficientemente en los foros habituales día tras día.
El amor sólo puede ocurrir, así pues, dejemos que ocurra.
El amor no ocure en el vacío.
En el vacío todo puede ocurrir. Es la potencialidad infinita.
Todos tenemos una cuerda que nos ata a alguien,en inglés "be long"(ser larga)="belong"(pertenecer).Cuanto más larga sea la cuerda,más perteneces a ese alguien.Y al revés.No hablo de pareja ,hablo de una mascota,un hijo drogadicto ,unos padres viejos...qué se yo.Un compañero de oficina que se ha separado...
Un beso Dr.Frankie Cerebrito,bonita voz tienes...fue un placer.
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